En estos tiempos de renovada tecnologización de nuestras vidas, hay nuevas modalidades en todos los ámbitos. ¿qué son los “bots”?. Los “bots” son programas informáticos que se utilizan para comportarse con respuestas en redes sociales, por ejemplo, imitando el comportamiento humano. ”Bots” es una palabra que abrevia, en realidad se llama “aféresis”, de la palabra “Robot”. En serias definiciones encontradas en internet, se lee: “Los bots pueden estar diseñados en cualquier lenguaje de programación. Funcionan en redes, especialmente en internet, y pueden interactuar con otros sistemas o usuarios. Pueden realizar múltiples funciones: editar textos, moderar conversaciones, responder preguntas, enviar correos electrónicos, entre muchas otras. Hoy en día son usados para realizar diversas tareas en plataformas muy populares, como Youtube, Twitter, Facebook o Instagram”.
Pero en el acelerado avance de modalidades de interacción en estos tiempos, irónicamente, se podrían definir como “Bots humanos”, aquellas personas que amparándose en la valiosa libertad de expresión que permiten las redes sociales, sistematizan su participación en procura de imponer ideas, desacreditar otras; negar afirmaciones ajenas, defender intereses ocultándose en su presunta independencia. Es decir, son personas, cuyos perfiles de Facebook pueden ser reales o falsos, pero operan tratando de defender algunas posturas o figuras, atacando a otras que resulten críticas a sus intereses.
En la actividad política parece que cada vez más aparecen estos “bots humanos” para tratar de desvirtuar informaciones, ocultando sus verdaderos intereses. En San José ya está pasando. Un ejemplo. Hace algunos días en sj.uy publicamos una noticia cuyo título era: “Piden información detallada sobre ingreso de ex frenteamplista a la Intendencia”, que a su vez era una reacción a otra noticia publicada en sj.uy horas antes (“Ex frenteamplista ingresó como “encargado” para mantenimiento en Kiyú”). Normalmente colocamos el enlace a las noticias en los facebooks; así fue como una usuaria “compartió” en su muro la noticia. Allí apareció el comentario de un hombre (con sus dos nombres y apellidos). En su comentario justificó las cargos políticos en la Intendencia, recordó que en octubre de 2016 hubo llamado a concurso para el ingreso de nuevos inspectores de tránsito; y agregó:
“Pero te quiero decir que ojo, mira que de estos artículos la cuarta parte es verdad y lo otro es fantasía. Este periodista no es creíble del todo. Analiza todas sus publicaciones y te vas a dar cuenta que le tiene un cariño especial a José Luis y al Partido Nacional, jaja. Algo de verdad tiene pero hay mucha ficción!!!”.
Al leer esto, me di cuenta que estaba ante un “bot humano” y parecía lógica una respuesta a ese ataque a mi profesión en general y a mi persona en particular. Mi primer respuesta a ese comentario, fue:
«Fantasía? Cuarta parte es verdad y lo otro fantasía? Cariño especial a José Luis y al Partido Nacional?. Ay ay ay… instintivamente me nace preguntar por esas afirmaciones. Pero no vale la pena. Indudablemente usted está haciendo mandados pretendiendo desacreditar la información y a quien escribe. Sin temor a equivocarme quizá usted tenga algún familiar trabajando junto al intendente o quizá usted mismo esté haciendo mérito (con este comentario) para entrar a trabajar a la Intendencia. Me equivoco? Por otra parte le invito a que aclare cuál es el 25% de la información que es verdad, así podré ampliar sobre aquel 75% que usted califica de «fantasía»».
Se dio un interesante intercambio, tenso pero respetuoso. Esta persona, que identificaré como AJSG, ya figuraba en mi radar, pues desde hace muchos días, tengo detectado su nombre como uno de los nuevos ingresos a la Intendencia. Además es el esposo de una persona que ya trabaja en el ámbito más cercano al Intendente Falero. En esta profesión hay que estar preparados para enfrentamientos – dialécticos y epistolares -, como en este caso. En el devenir del intercambio, llegó el punto donde directamente escribí, ciertamente un poco cansado :
“Y ya qué estamos en este terreno… con sus intentos de desacreditar, le puedo preguntar cuándo entra usted a trabajar a la Intendencia?”.
Respecto a su inminente ingreso le consulté en reiteradas oportunidades, pero no obtenía respuestas. Jamás escapo a una discusión; es mi obligación pues “si tiro la piedra” pongo la cara. La respuesta que recibí de AJSG , no era aceptable, pues sentí que me trataba de HDP… Este hombre escribió:
“Todas mis opiniones son muy personales, no le hago mandados a nadie. Los «profesionales» por lo general accionan de otra manera y las personas «publicas» se bancan las criticas. No es nada personal, es una opinión que me he formado mirando y leyendo sus informes. Ojala la comprensión, el respeto y la tolerancia estén dentro de sus valores personales. Salú, y perdón si lo ofendí. Lejos estuve de querer hacerlo. Buenos días!!!”.
A continuación mi respuesta fue:
“Si yo lo ofendí con alguna de las respuestas, le pido disculpas. Usted si me ofendió al opinar livianamente sobre mi trabajo. Para finalizar le pido que me responda la pregunta ¿cuándo entra usted a trabajar a la Intendencia?”
Obviamente esto ocurría en publico, no eran cometarios privados. La duda sobre la veracidad de mi trabajo ya estaba instalada por el comentario inicial de AJSG y una clara muestra de ello fue el comentario de la titular de ese Facebook donde se había compartido la noticia de sj.uy. MV, asi figura el nombre de ese facebook, escribió:
“Pablo Fernández Acheriteguy no tendrás mal esa info de q AJSG va ingresar? viste q la gente es mala y comenta”.
Respondí:
“MV tengo la información confirmada, pero me gusta cotejarlo con varias fuentes, por eso no he publicado nada al respecto. Por eso mismo, aprovechando que AJSG, difamó mi información, es que le pregunto directamente a él. Que mejor que ir a la fuente!!!! Estoy esperando su respuesta”.
La respuesta no llegaba y claramente esta AJSG ya no tenía muchas ganas de seguir. En verdad yo también estaba cansado de perder el tiempo en este debate; sólo me servía para reafirmar mi convicción que la política, el poder y los intereses son muy fáciles de ocultar cuando la gente comenta en las redes sociales. Pero al rato un mensaje privado, disparó nuevamente mi atención y me distrajo de la nota que estaba escribiendo sobre el disimulado accionar político en las redes sociales, que en el mejor de los casos buscan desacreditar periodistas o directamente insultan.
En ese momento, ocurrió que un usuario de Facebook me preguntaba si yo había borrado todo ese intercambio con AJSG. Obviamente no. Efectivamente, en aquel mismo lugar donde se había dado el intercambio, ya no están ni las afirmaciones de AJSG ni mis respuestas. NO demoró en desatarse una fuerte participación de otros usuarios asombrados por la desaparición de una treintena de comentarios. Allí mismo informé que – zorro viejo en esta profesión – ya tenía guardados todos los comentarios y hasta un video de aquel intercambio epistolar.
Mágicamente reapareció AJSG, admitiendo que había borrado sus comentarios y junto a ellos, mis respuestas. AJSG reveló:
“Solo borré los mios porque la verdad no me gustan las problemas y creo que te ofendí pablo. Y como los otros eran respuestas a los mios creo por eso se borraron (…) Simplemente eso, no quiero tener problemas ni con vos ni con martita ni con nadie. Te pido disculpas otra vez, no se que otra cosa pueda hacer para disculparme. Si querés lo hablamos no hay ningún problema. Discúlpame de verdad”.
Obviamente, que acepté esas disculpas, aunque la considero innecesaria, porque es a lo que me expongo al dedicarme al periodismo. Pero, AJSG seguía sin responder, cuándo entraría a trabajar a la intendencia. En medio de sus disculpas y aclaraciones de que “no era personal” ,admite que se comportó como “un fanático”.
Mi respuesta a eso:
“Yo no tengo problemas personales contigo… pero ya lo dije, es muy fácil sembrar dudas sobre la veracidad de la información y desacreditar a un periodista. Hablamos cuando quieras. Dos cosas. Me dicen que Daguerre recién hizo declaraciones a radio 41, salió al aire confirmando todo lo que yo escribí y la segunda cosa que quiero, es que me digas cuando entrarás a trabajar a la Intendencia… por otra parte debo reconocer y felicitar tu valor en admitir que borraste los mensajes y afrontar la discusión”.
Ya en otro tono, respondió:
“La verdad no se, igual veo que no se te escapa nada. Por eso te felicito también, además que nunca me faltaste el respeto. Además creo que debo tener más respeto hacia el trabajo de los demás para la próxima. Y lo mio fue sin información ninguna, solo un comentario fanático. Perdón Pablo de verdad”.
Insistí que las disculpas ya estaba aceptadas, por eso pregunté:
“Ya acepté tus disculpas…’La verdad no se’ te referís a la fecha en que entrarás a trabajar en la Intendencia?”.
Su respuesta fue:
“Si claro. Y perdón otra vez, ni te conozco. No tendría que haber hecho ese comentario.”.
Para cerrar aquel agotador intercambio, escribí:
«La verdad AJSG, me alegra mucho que hayas recapacitado respecto a tu actitud de desacreditarme. Yo trabajo desde la honestidad. Soy absolutamente consciente que en determinados ambientes se generan manijas ( ha ocurrido en todos los tiempos en todo el mundo) es como una enfermedad del poder… Y si, estoy al tanto de todo es porque desde hace 30 años elegí esta profesión…es mi obligación. Me duele muchísimo cuando con intención o sin ella, se derivan a ataques personales (los considero ataques personales, pues para mi, la profesión es mi vida), ojala que no tengas problemas con esto y si los llegas a tener, avisame, pues también sería injusto, hay tanto deshonesto trabajando y acomodado, que me molestaría mucho, que por ‘reacciones inconvenientes’, te castigaran. Insisto lo que más valoro de todo este cruce es tu honestidad para afrontar el error”.
Yo estaba preocupado, porque intuía que AJSG, según el mismo lo admitía, podía tener problemas en el enfermizo ambiente del poder. Si bien estoy en contra de los acomodos, no puedo descalificar a la gente que logra acomodarse. Yo no lo haría. Al final dí por terminado este episodio escribiendo:
“No, no te sientas mal. Comprendo el contexto, de cualquier forma sería bueno charlar para informarte de muchas cosas que pueden ayudar a corregir cosas que están mal… y ojala tengas oportunidad de cambiarlas para el bien de todos”.
Lo que descubrí como “un bot humano”·, terminó siendo una persona mal informada, manijeada y motivada por naturales intereses que no sabía canalizar al momento de participar en las redes sociales. Aquí, tenemos que aprender todos, principalmente la gente que está en cargos de responsabilidad – sean del partido que sean – que es preferible que se hagan los boludos mientras puedan, antes que salir a “matar al mensajero”. Los gobernantes y actores políticos, deben aprender que las redes son imparables; la verdad siempre aflora, y en definitiva hasta las opiniones más causticas a una gestión, solo buscan una cosa que se corrijan los errores, advertir de abusos y mejorar la situación. No me gusta escribir artículos en primera persona – profesionalmente tampoco es correcto – , aquí no me quedó otra alternativa.
Notice: Undefined variable: commenttitle in /home/sanjosecom/public_html/wp-content/plugins/facebook-comments-sync/comments.php on line 51